GERÓNIMO STILTON, EL MUSICAL: somos La Compañía de la Fantasía

Santander, 4 de mayo de 2.013

Gerónimo Stilton  es un simpático ratón que nació en el año 2.000, de la mano de la escritora italiana Elisabetta Dami. Dirige "El Eco del Roedor", el periódico más famoso de Ratonia, la capital de la Isla de los Ratones, y allí vive apasionantes aventuras que después plasma en las páginas de los libros que ahora pueblan las estanterías de nuestras librerías para iniciar a nuestros pequeños en el hábito de la lectura como si de un juego se tratase.

En el año 2.012 Ángel Llácer (director artístico) y Manu Guix (director musical) apostaron por llevar a los teatros su última aventura y construyeron un musical en el que todos juntos emprendemos un apasionante viaje al Reino de la Fantasía para rescatar a la princesa Floridiana.

Siete reinos cruzarás,

y a sus duendes tú verás,

brujas, hadas y algún trol,

sirenas y un dragón.

Siete historias que narrar,

y peligros que contar.

Heroísmo y valor.

¡Mucho miedo y temor!

Siete notas sonarán:

¡do, re, mi, fa, sol, la, si!

Siete historias que vivir,

siete puertas por abrir.

Tenemos que partir.

A Floridiana hay que salvar.

¡A Fantasía hay que llegar!

Hoy las puertas del Reino de la Fantasía se han abierto en Santander. Hace semanas que mis sobrinos, sus padres y yo coqueteábamos con las aventuras y emociones que hoy hemos vivido en la Sala Argenta del Palacio de Festivales.
Los días previos a nuestra cita Dani se ha leído el libro mientras Adrián, que prefería que el musical  le sorprendiese, se ha conformado con olisquear sus páginas. Cuando hemos llegado al teatro ambos conocían ya a Gerónimo y a todos sus compañeros: Plumilla, un simpático sapo que se convertirá en su guía durante su deambular por el Reino de la Fantasía, Alys, la domadora de dragones, Boletus y Setina, los reyes del Reino de los Gnomos, y Valeroso, un enorme gigante de gran corazón. Todos juntos forman La Compañía de la Fantasía:

Compañía, somos la compañía,

La Compañía de la Fantasía,

el valor es la unión,

primera regla de honor.

Ayudarnos, protegernos,

siempre y en cualquier lugar;

socorrernos, asistirnos,

nuestra norma principal.

Comienza el espectáculo y aunque la música y las canciones tienen ritmo y las coreografías son correctas, los decorados y la escenografía resultan muy decepcionantes y el guión no consigue que la aventura encerrada entre las páginas del libro salte al escenario.

Pero lo cierto es que todo esto da igual porque los niños -mis sobrinos, su primo y todos los demás- disfrutan viendo a sus personajes, cantando sus canciones y tocándoles cuando se mezclan entre el público, y hoy su sonrisa y su emoción son lo mejor de la función.

El espectáculo ha terminado. Tenemos que separarnos; nuestra compañía debe disolverse, pero antes nos tomamos un chocolate todos juntos y abrimos el libro que nos ha acompañado durante la función para perdernos en el País de los Gnomos y conocer los ejércitos de la malvada bruja Brujaxa.

El viaje al Reino de la Fantasía ha concluido pero podemos regresar a él siempre que queramos; montones de sorpresas nos esperan entre las páginas de los libros de Gerónimo Stilton.