jueves, 8 de agosto de 2013

RULO Y LA CONTRABANDA: cada vez más nada

Santander, 24 de julio de 2.013


Rulo era la voz de La Fuga.
En otoño de 2.009 abandonó la formación campurriana y un año después publicó su primer trabajo en solitario, "Señales de humo". En mi opinión se precipitó: al disco le faltaba chispa pero fue un éxito de ventas y sobre el escenario el buen trabajo de su Contrabanda y los rescoldos de La Fuga hicieron que sus 'señales de humo' cobrasen vida.

En septiembre de 2.012 salió al mercado su segundo disco, "Especies en extinción", confirmando mis peores presagios.
Con el fin de averiguar a que huelen las nubes parece que Rulo ha cambiado definitivamente de rumbo y un atracón de empalagosos versos encorsetados y de rimas adolescentes envenenan sus canciones. ¡No me las creo!

Hoy él y su Contrabanda se han convertido en el plato fuerte del 'Amstel, Música en Grande' y al difuminarse el último resplandor del castillo de fuegos artificiales lanzado desde El Sardinero han ocupado su lugar sobre el escenario de la Campa de La Magdalena.


Obviamente no han sido sus 'señales de humo' ni sus 'especies en extinción' las que hoy me han traído hasta aquí y si esta noche estoy perdido entre la multitud entregada a sus canciones es por la compañía: la suya y sobre todo la mía.


Los rescoldos de La Fuga se van apagando. Su pasado cada vez tiene menos sitio en el nuevo repertorio y el buen trabajo de Txarli Arancegui (batería), Quique Mavilla (bajo) y Dani Baraldés y Fito Garmendia (guitarras) no es suficiente para evitar que los versos de mercadillo compuestos por el campurriano se vean abocados a la extinción que él mismo les auguró.
Sobre el escenario Rulo agita los brazos y se emociona: es un peliculero que ni siquiera cuando celebra el centenario del Racing consigue encenderme.

Un grupo de mariachis han sido los encargados de ponerle el punto y final a la noche cantando "El vals del adiós": podía haber quedado bonito pero Rulo ha preferido retirarse a un lado y verles cantar desde la barrera convirtiendo la colaboración en un sinsentido más.
Hasta aquí hemos llegado. Lo suyo es cada vez más nada...


1 comentario:

  1. Espero que la gente que le dora la píldora no le haga perder la realidad y que vuelva un poquito a los orígenes.

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