martes, 17 de agosto de 2021

LA LLAMADA: lo hacemos y ya vemos...

Santander, 27 de junio de 2.021

Coincidiendo con la celebración del día del Orgullo LGTBI, Televisión Española ha programado la emisión de “La Llamada”, película protagonizada por Macarena García, Anna Castillo, Belén Cuesta y Gracia Olayo.



En 2.017, Javier Ambrossi y Javier Calvo -los Javis-, trasladaron a la gran pantalla su propia obra de teatro, un musical underground, incorrecto y absurdo, pero también fresco, espontáneo y muy divertido, estrena-do en el vestíbulo del teatro Lara en 2.013 y merced al cual ambos fueron catapultados hacia el éxito y la fama.



Que Dios descienda del cielo bajando por una escalera vestido con un traje de lentejuelas y cantando canciones de Whitney Houston para tratar de seducir a una joven tiene algo de irreverente…

 


Share my life, take me for what I am
because I'll never change all my colours for you.
Take my love, I'll never ask for too much;
just all that you are and everything that you do.
I don't really need to look very much further.
I don't want to have to go where you don't follow.
I won't hold it back again, this passion inside.

I can't run from myself; there's nowhere to hide.
Don't make me close one more door;
I don't wanna hurt anymore.
Stay in my arms if you dare,
or must I imagine you there.
Don't walk away from me...
I have nothing, if I don't have you...
You see through, right to the heart of me.
You break down my walls with the strength of your love.
I never knew love like I've known it with you, but…

 

If I should stay, I would only be in your way,
so I'll go, but I know

I'll think of you every step of the way.

And I will always love you.

We both know I'm not what you need.
I hope life treats you kind.
And I hope you have all you've dreamed of.
And I wish you joy and happiness.
But above all this, I'm wishing you love,
and I will always love you.

 

Que otra le confiese a una monja que es bollera y le plante un beso en los morros, y que esta responda dejando los hábitos para irse con ella, también lo es…




Pero, en el fondo, tanto lo uno, como lo otro, no son más que una manera de exorcizar los fantasmas de Javier Ambrossi y convertir los conflictos que le provocó su educación en un colegio de índole religiosa en algo divertido, inspirador y luminoso.

 

María (Macarena García) acude al campamento cristiano de verano ‘La Brújula’ con su amiga del alma: Susana (Anna del Castillo). Juntas, sobreviven al tedio en un momento de mutación y desconcierto. Su pasión por el electro-latino les impide disfrutar de unas maravillosas jornadas de piragüismo y reflexión en Palazuelos de Ledesma con el resto de sus compañeras, pues, después de beberse una noche loca, las dos se ven obligadas a quedarse castigadas en el albergue al cuidado de un par de monjas bue-nas e inocentes: Bernarda (Gracia Olayo) -la nueva coordinadora del campamento-, y la joven Milagros (Belén Cuesta).



Es entonces cuando las dos, e incluso Milagros, viven su particular llamada…


 

Cuando no encontramos la velocidad
y las piernas se clavan,
cuando no dices nada;
entonces, empiezo a escuchar.

Cuando no has tenido la oportunidad
y las gafas se empañan,
cuando vamos de cara;
entonces, echamos a andar.

Cuando nos pasamos la electricidad
de tu dedo a mi espalda,
cuando estás devorada;
entonces, no hay miedo a la oscuridad

Sueño con estar por encima de todo,
por debajo de tu falda;
con la noche llena de luz
y tu voz pausada.

Hoy he sentido la llamada
con toda la fuerza,
las luces apagadas
y las piernas abiertas.

 

(“La llamada”, Leiva)

 

Cambiar no está mal. Enamorarse de Dios, dejarlo todo por él y subirse a su coche no es fácil. Volver la vista atrás, reconocer que nos hemos equivocado y aceptarnos como somos tampoco. Mezclar la religión con un poco de reguetón y con una monja lesbiana puede resultar un tanto provocador, pero no es más que el envoltorio utilizado por los Javis para hablar del respeto a los demás y del valor necesario para ser uno mismo y encontrar y aceptar nuestra propia identidad.

 


“La Llamada” es una cuestión de fe, un antídoto contra el miedo y un tratado sobre las ganas de vivir: “Lo hacemos y ya vemos, pero al menos lo intentamos; y, si sale mal, pues a otra cosa…”.

 

Step by step.
Bit by bit.
Stone by stone, yeah!
Brick by brick.

Step by step.
Day by day.
Mile by mile, oooh!
Now, don't you slip away.
Don't you go too far,
because, when I close my eyes,
I know who you are.

You are the dark emotion
that makes me hold my breath,
just like the silent water
upon the ocean's depth.

It's just the fear of falling
that makes my lose my grip.
It's just the fear of falling
that makes my fingers slip

Step by step.
Bit by bit.
Stone by stone, yeah!
Brick by brick.

Step by step.
Day by day.
Mile by mile, oooh!
Go your way.

Baby, don't give up!
You've gotta hold on to what you've got.
I said: baby, don't give up!
You've gotta keep on moving: don't stop, yeah!
Just like a new excursion,
upon an open road.
I've got the will to take me,
just where I want to go.

Come on, baby: keep moving on!
Come on, baby: keep on!
Keep up!

 

(“Step by step”, Annie Lennox)


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