Heras, 19 de septiembre de 2.020
Visto desde el pico Llen (570 m.), el pico
Castillo (263 m.) es poco más que una tachuela, pero, a ras de suelo, su
silueta resulta imponente.
Prolongación natural de la sierra de Peñacabarga,
se alza junto a Solares y presenta un vistoso alzado cónico cuya vertiente sur
ha sido carcomida por una cantera clausurada no hace demasiados años.
Hasta hoy, su ascensión era para mí un asunto
pendiente. ¡Ya está resuelto!
Nos reunimos junto a la presa del embalse
de Heras y echamos a andar por la carretera que bordea el pantano.
Poco después de pasar las instalaciones de
la granja ‘La Mina’, tomamos un desvío a la izquierda y nos aproximamos a la
base del cono para ascender a su vértice por el lado sur.
Al principio, las pistas abiertas para la
explotación de la plantación de eucaliptos que ocupa la parte inferior del
monte nos permiten ganar altura cómodamente. Después, subimos a derecho por un
estrecho sendero, embarrado y con una fuerte pendiente, que se cuela entre espinosos
matorrales y nos conduce, en un abrir y cerrar de ojos, hasta lo alto del pico.
A nuestros pies se extiende el municipio
de Solares y, un poco más allá, se levanta el recientemente conquistado Monte
Vizmaya.
Las vistas son espectaculares: contemplamos
la bahía de Santander en su máximo esplendor, el vecino pico Llen y, al otro
lado de la autovía, nuestras queridas montañas pasiegas y merachas.
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Por miedo a resbalarnos, buscamos un
camino alternativo que nos permita descender sin pasar por los pindios tramos
embarrados que hemos superado en la subida, pero no lo encontramos. Volvemos
por donde hemos venido y, al final, resulta no ser para tanto.
Llegamos a los pies de la montaña sin
incidentes y, siguiendo las indicaciones de un simpático recolector de castañas,
bordeamos el pantano de Heras por la orilla contraria recorriendo un cómodo
camino que discurre junto a hermosos prados verdes que constituyen el hogar de
caballos, ovejas y cigüeñas antes de llegar al bunker del Banco Santander.
De ahí, al coche. Degustamos un delicioso
desayuno saludable y nos despedimos hasta la próxima.
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