sábado, 27 de abril de 2013

MARWAN: son sus versos los que me empujan a escucharle

Santander, 26 de abril de 2.013


Hoy Marwan, de la mano de 'La Casa del Abuelo', ha vuelto a Santander para estrenarse en el Black Bird Club.
Su público, fiel, se ha entregado desde el primer momento; a mí me ha costado un poco más.
Antes he tenido que dejar a un lado sus chistes y monólogos y retirar la hoja de parra con la que cubre las 'vergüenzas' que la letra de sus canciones descubre para sumergirme en ellas y buscar respuestas en sus versos. Ellos son los que me empujan a escucharle.

Vicky Gastelo se escondía entre el público. Con ella ha compartido primero el columpio de la falda de su madre y después palabras cariñosas y un pedazo de escenario. ¡Juegan en el mismo equipo!


Si quieres saber cómo escribe Marwan, imagínate un trapecista, imagínatelo suspendido en el aire cuando ya ha soltado uno de los columpios y aún no ha alcanzado el otro, con un vacío lleno de interrogaciones bajo los pies y la mano abierta hasta el más allá de sí misma en busca de algo a lo que agarrarse. Marwan salta de la poesía a la canción y cada vez que consigue atrapar un verso como los que se escuchan en "Las cosas que no pude responder", el público siente alivio y euforia a partes iguales, como todas las personas que iban a caer y se han salvado.

...
("Un trapecista a cara o cruz",
Benjamín Prado)

Mi corazón, alérgico a todo, me dice que tú y yo podríamos salvar el mundo pero esconde cicatrices y ahora he de decir si quiero o no quiero un poco más; cuesta preguntar cuando ya sabes lo que vas a oír... No quiero escusas ni reproches, tú eres mi paracaídas:


Y ahora ¿quién podrá entender?
Y ahora ¿quién coño va a ser mi otro cuerpo, mi otra piel, mi equilibrio, mi equipaje?
¿Y quién será Penélope cuando este tonto se vaya de viaje?
¿Quién va a ser mi playa en Madrid, mi chica rapada que en la boca queda besos sin pedir, mi copa rota, mi próximo verano y mi herida?
¿Quién va a ser mi paracaídas?

("Mi paracaídas")


En ocasiones la luz de reserva se enciende y el corazón pide una tregua; nunca lo tuve todo pero soy experto en echar leña sobre hogueras apagadas y entonces...


quinientas preguntas flotando por la habitación,
quinientas versiones sobre una misma discusión,
quinientos escotes que no me alivian el dolor,
quinientas respuestas necesitaba y tuve dos.

("Sueños sencillos")


Inmadurez, incomprensión, insensatez, inseguridad, imprudencia, bendita adolescencia... Envuélveme para regalo algunos besos y tal vez así consiga ser feliz un rato:


Hoy voy a ser felíz y voy a sonreir,
le daré un cheque en blanco a mi porvenir.
Hoy voy a correr más que la mediocridad,
denunciaré por malos tratos a la soledad.
Hoy voy a hacerlo bien y voy a salir bien
en las fotografías que nunca me haré.
Hoy voy a ser feliz, y pienso recibir
una postal que diga cuanto te acuerdas de mí.

("Canción de autoayuda")

En ocasiones me hago preguntas para las que no encuentro respuesta por la sencilla razón de que no necesitan ser formuladas para que mi corazón, aunque sea un alumno limitado que nunca aprende y que siempre deja la misma asignatura para septiembre, responda.
El resto, todas las que sí me hice y no pude responder, se quedarán de momento en la chistera:

¿Por qué aún sientes dentro de tu pecho todos los latidos de mi cuerpo?
¿Por qué no dejo de sentir que todavía formas parte de mi piel?
¿Por qué decides que te quieres volver loca cuando yo me he vuelto cuerdo?
¿Por qué intentamos avanzar mirando de reojo lo que pudo ser?
¿Por qué las cosas que arreglamos al besarnos las rompemos con palabras?
¿Por qué, si yo te digo "adiós", el corazón me dice "inténtalo otra vez"?
¿Por qué parece que sólo nos entendemos con las luces apagadas?
¿Quién diablos sabe calcular bien la distancia que debemos mantener?
...
¿Por qué es tan raro que el amor siempre resiste mucho más de lo que dura?
¿Por qué hay cuestiones en mi piel que sólo puede respondérmelas tu piel?
¿Por qué, si vuelves a mandar algún mensaje, aún se me rompen las costuras?
¿Por qué hacemos cosas que juramos que no llegaríamos a hacer?
¿Por qué, si aún sientes lo de antes, tus ojos me dicen "ya no me haces falta"?
¿Por qué, si siento lo de siempre, no me atrevo a decirte "quedate"?
¿Por qué será que la felicidad ya nunca nos devuelve la llamada?

("Las cosas que no pude responder")



2 comentarios:

  1. :) Me alegro que te haya gustado...

    El próximo es a mi gusto uno de los conciertos mejores que os pedo ofrecer en cuanto a lírica: Luis Ramiro.

    Abrazo!

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  2. Nunca he visto a Luis Ramiro en directo y tengo ganas de hacerlo pero el día 18 estaré fuera; para la próxima...

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