Santander, 28 de julio de 2.011
Reconozco
que me dejé llevar a la campa de la Magdalena sin estar muy convencido de que
realmente el concierto de Maldita Nerea fuese a gustarme.
Puede
que mis reticencias fuesen las que no me dejaron disfrutar del directo que los
murcianos ofrecieron a un público entregado desde el primer momento y que coreó
sus canciones de principio a fin.
En cualquier caso lo cierto es que fue un concierto que no me hizo vibrar;
no me transmitió nada y aunque sobre el escenario había cuatro músicos acompañando
a Jorge Ruiz (vocalista y alma mater de Maldita Nerea) aquello no parecía un
grupo de verdad sino más bien una orquesta que se hubiese aprendido unos temas
para hacer unos ‘bolos’ pero que no los sintiese suyos y no disfrutase tocándolos
en directo.
De
todos modos catorce mil personas parece que lo gozaron así que tal vez fuese yo
el que no tenía el día…
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