LA FUNCIÓN POR HACER: la vida es puro teatro

Santander, 11 de agosto de 2.010

Cuando hojeé por primera vez el programa de actividades de la UIMP para este verano me llamó la atención una obra de teatro: “La función por hacer”.

La producción fue estrenada el invierno pasado en Madrid, en el hall del teatro Lara.

Un puñado de espectadores se apiñaban a las doce de la noche alrededor de un caballete con lienzo, un banco y seis jóvenes actores que derrochaban energía y entusiasmo.

A partir de ahí el boca a boca hizo el resto y la compañía pudo viajar a Barcelona, volver a Madrid (esta vez al teatro Español) y ahora está de gira por todo el país.

“La función por hacer” es una adaptación bastante libre de la obra de Pirandello “Seis personajes en busca de autor”.

Sobre el escenario dos jóvenes actores comienzan la representación de una obra de teatro.

Pronto son interrumpidos por cuatro individuos que aparecen por los pasillos del teatro. Se trata de cuatro personajes huérfanos de autor que viven y sufren una y otra vez la misma escena inmersos en una obra inacabada. Sienten la necesidad de contar su historia para liberarse por fin.

Los sentimientos fluyen por el escenario y el humor y la tragedia cautivan al espectador.

Fantasía y realidad se entremezclan porque la vida es puro teatro.

"El teatro no puede morir. Forma parte de la vida misma; todos somos sus actores.

Y aunque fueran abolidos y abandonados los teatros, el teatro seguiría en la vida, insuprimible. Y siempre sería espectáculo la misma naturaleza de las cosas."

Luigi Pirandello (1.867-1.936)