Santander, 16 de septiembre de 2.013
El verano se nos escapa de las manos.
El otoño se adelanta y pronto tendré que enfrentarme al inquietante futuro que me espera a la vuelta de septiembre pero mientras tanto hoy festejo que esta noche, en el Black Bird Club, como todos los lunes, reina el rock.
Las Black Girls no han parado en todo el verano pero yo tampoco y después de tres meses tenía ganas de volver a encontrarme con ellas.
A Marta y Ana, las benjaminas del grupo, demasiado tensas, les falta frescura y desparpajo pero siguen acumulando tablas mientras en la sombra, desde el fondo del escenario, Zoe (batería) marca el ritmo y sostiene a la banda; bajo los focos Cristina (bajo) derrocha seguridad y escolta a la descomunal Larza que despliega toda su gracia, carisma y personalidad para contagiarnos su fuerza y seducirnos con su prodigiosa presencia: ¡¡¡ella es la voz!!!
Go!
So one, two, three:
take my hand and come with me
because you look so fine
that I really wanna make you mine.
...
Big black boots,
long brown hair,
she's so sweet
with her get back stare.
Well, I can see
you home with me,
but you were with another man, yeah!
I know we ain't got much to say
before I let you get away, yeah!
I said: are you gonna be my girl?
Be my girl, be my girl.
Are you gonna be my girl? Yeah!
(Jet, "Are you gonna be my girl?")
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