domingo, 1 de diciembre de 2013

IRON MAN: me temo que los chupetes van a tener que esperar...

Mogro, 27 de noviembre de 2.013


En 2.008, poco antes del estreno de "El increíble Hulk", los estudios Marvel habían estrenado su primera película: "Iron Man", dirigida por Jon Favreau y protagonizada por Robert Downey Jr., Jeff Bridges, Gwyneth Paltrow y Terrence Howard.


Mientras el General Ross apostaba por el programa 'supersoldado' las Industrias Stark lo hacían por el desarrollo de un sofisticado armamento...



Tony Stark (Robert Downey Jr.) es un socarrón multimillonario, inteligente y mujeriego, que, aún sin saber pintar, sabe pintar, desde muy pequeño le hizo sombra a su padre, el legendario diseñador de armas Howard Stark, por su mente brillante y singular: a los cuatro años construyó su primera placa base, a los seis su primer motor y a los diecisiete se licenció con los máximos honores en M&T.
Cuando sus padres murieron el amigo y socio de Howard Stark, Obadiah Stane (Jeff Bridges), intentó llenar el vacío dejado por el legendario fundador de la compañía hasta que a la edad de veintiún años retornó el niño prodigio encumbrándose como el nuevo director ejecutivo de Industrias Stark y, con las llaves de la empresa en la mano, inauguró una nueva etapa con armas más inteligentes, robótica avanzada y selección de objetivos por satélite que cambió totalmente la industria armamentística de los EE.UU.


Cuando Tony Stark viajó a Afganistán para presentar uno de los últimos productos diseñados por su empresa cayó en una emboscada y fue capturado por una organización terrorista.
La metralla estuvo a punto de matarle pero sobrevivió conectado a un generador inspirado en la tecnología del reactor ARK desarrollado por su compañía y después de tres meses escapó del campamento en el que estaba secuestrado embutido dentro de un burdo prototipo de armadura prometiendo no desperdiciar su vida.
Regresó a los EE.UU.: encargó una hamburguesa y organizó una informal rueda de prensa en la que expuso sus problemas de conciencia y anunció su intención, después de haber visto como asesinaban a jóvenes americanos con las armas que él mismo había diseñado para defenderles y protegerles, de cerrar la división de Industrias Stark dedicada a la fabricación de armamento.

La junta general de accionistas de la empresa solicitó un mandamiento judicial para incapacitarle alegando estrés postraumático y argumentando que él y su nuevo rumbo no encajaban con el espíritu de la compañía.
Mientras Tony permanecía encerrado en su taller trabajando en el desarrollo de una sofisticada armadura de vivos colores construida con una aleación de oro y titanio y con capacidad para volar, su socio rebasó ciertos límites.
Alguien tendrá que deternele y esta vez sí que va a merecer la pena verlo...



El carácter socarrón del protagonista y su peculiar relación con Virginia 'Pepper' Pots (Gwyneth Paltrow): su ayudante, una mujer muy especial -tímida, discreta y guapa-, dispuesta a hacer todo lo que él requiera, lo cual puede suponer sacar la basura de casa, jugar a 'operación' o salvarle la vida, convierten a esta película en mucho más que una simple exposición de efectos especiales.


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