viernes, 20 de junio de 2014

LOBEZNO INMORTAL: sayonara, baby

Mogro, 14 de junio de 2.014


En 2.013 James Mangold dirigió "Lobezno inmortal" ("Wolverine"), una producción de Marvel Studios que pretende explicar que fue de Logan (Huhg Jackman) tras la muerte de Jean.


Ocho años después de matar a Phoenix, él vive a la intemperie en un bosque a las afueras de un pequeño pueblo canadiense, convertido en una especie de ermitaño que sueña cada noche con la mujer a la que amó. Bajo su sucia melena y su descuidada barba oculta al soldado que siempre fue y que ahora se limita a buscar una muerte honrosa que acabe con su sufrimiento.

Allí fue donde le encontró Yukio (Rila Fukushima), una especie de ninja japonesa a la que su maestro recogió de la calle para convertirla en la mejor amiga de su nieta.


Lleva más de un año buscándole para llevarle a Tokio, donde Yashida le espera. Logan le conoció durante la Segunda Guerra Mundial, pero ahora se está muriendo: le gustaría despedirse, agradecerle que un día le salvara la vida y recompensarle ofreciéndole algo que nadie más en el mundo puede darle. 
La eternidad puede ser una maldición: las pérdidas se acumulan y uno puede quedarse sin razones para vivir, convertido en un samurai sin amo. Él puede volverle mortal: su capacidad para sanar puede ser transferida a otra persona...´
Cuando se conocieron, Yashida no estaba listo para morir y ahora tampoco lo está: teme que destruyan el imperio que ha construido y le preocupa la seguridad de Makido (Tao Okamoto), su nieta. Si le transfiriese su capacidad, Logan podría vivir una vida larga y ordinaria: enamorarse, tener una familia, envejecer y, algún día, morir.


Apenas le dio tiempo a rechazar su propuesta...
El viejo murió esa misma noche y durante su funeral, la mafia japonesa intentó secuestrar a Makido. Logan consiguió impedirlo pero algo va mal: las heridas que recibió en la pelea no se curan y ha perdido mucha sangre
Sería fácil dejarse morir y reunirse con Jean pero la chica le necesita. Puede que halla encontrado una razón para vivir...


No hay comentarios:

Publicar un comentario