Santander, 10 de agosto de 2.011
La
Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), incluida en el programa de
actividades culturales previsto para este verano, nos ha ofrecido en esta
ocasión una velada teatral en el Casyc que nos brinda la oportunidad de rememorar los veranos de nuestra infancia y
adolescencia, “Días estupendos”.
Una desvencijada tapia de piedra, unas robustas encinas y al fondo
montañas y nubes: un decorado precioso.
Cinco buenos actores (Paco Déniz, Elena González, Juan Antonio Lumbreras, Natalia Hernández y Pablo Vázquez), un amplio ramillete de personajes y una sucesión de escenas divertidas que nos recuerdan situaciones vividas en veranos pasados: campamentos, cartas escritas a nuestros padres, paseos en bicicleta, días de playa, excursiones al monte, viajes, verbenas, experiencias fugaces, reencuentros y despedidas.
Cinco buenos actores (Paco Déniz, Elena González, Juan Antonio Lumbreras, Natalia Hernández y Pablo Vázquez), un amplio ramillete de personajes y una sucesión de escenas divertidas que nos recuerdan situaciones vividas en veranos pasados: campamentos, cartas escritas a nuestros padres, paseos en bicicleta, días de playa, excursiones al monte, viajes, verbenas, experiencias fugaces, reencuentros y despedidas.
El
madrileño Alfredo Sanzol, autor y director de la obra, explica en el programa
de mano que tiene mala memoria y que ésta es más bien una memoria no
consciente: no recuerda hechos pero sí sensaciones. “Días estupendos”, dice,
“es un viaje inventado a mis veranos, un
sueño que sueño despierto y que necesito soñar para poder recordar. Cuento
historias para poder inventar los hechos que no recuerdo, y para hacerlo me
sirvo de las sensaciones que si guardo”.
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